Perico delgado se opone al casco obligatorio en ciudad
Perico Delgado ve
lamentable "hacer el juego a los seguros" obligando a usar el casco
El exciclista y representante de Ciclistas Profesionales Perico Delgado
ha advertido de que obligar a llevar el casco en ciudad es "hacer el juego
a los seguros", ya que "un ciclista atropellado con casco tiene un
precio y sin casco, tiene otro", lo que considera "una cosa muy
triste y lamentable". Delgado ha intervenido este miércoles como experto dentro de la ronda de consultas que ha abierto la Comisión de Seguridad Vial del Congreso para valorar la propuesta de la DGT de obligar a usar casco en ciudad (actualmente sólo es obligatorio en vías interurbanas). La medida está incluida en el borrador de reforma del Reglamento General de Circulación y también -en cualquier caso para los menores de 18 años- en el anteproyecto de reforma de Ley de Tráfico aprobado por el Consejo de Ministros este verano.
El ciclista ha señalado que el único país en que es obligatorio ahora el casco en vías interurbanas en Europa es en España y ha señalado que obligar a usarlo ahora también en ciudad sería "crear un problema donde no lo hay", en lugar de fijarse en lo que se hace en países del entorno. En este sentido, ha incidido en que para reducir los accidentes lo más útil sería "estimular" el uso de la bicicleta, ya que "cuantas más ciclistas haya en las carreteras, más seguro será".
Además, ha apuntado que si se obliga a llevar casco por ley en ciudad, y un ciclista es atropellado por un automovilista y esa persona no lleva casco, el seguro del coche puede librarse de pagar la indemnización porque el ciclista estaría incumpliendo la ley. "Es lamentable", ha enfatizado.
Asimismo, se ha mostrado crítico con la DGT y ha criticado que "para demostrar de cara a la galería que vela por la seguridad se obliga a usar casco en ciudad a los ciclistas, mientras se permite en algunos tramos de autovías circular a 130 Km/h". Igualmente, ha lamentado que en algunas campañas se dibuje a los ciclistas como "un kamicace" o "un irresponsable".
En general, ha relativizado la peligrosidad de viajar en bici y ha afirmado que cada vez que se dibuja al ciclismo como una "práctica realmente peligrosa", se llena de rubor porque "un ciclista no se cae fácilmente" y montar en bicicleta supone "factores mucho más positivos para la salud que esa desgracia que puntualmente puede suceder y que muchas veces es ajena al ciclista". "Hay que quitarse esa noción de que el montar en bicicleta es peligroso", ha añadido.
Por todo ello, Perico opina que el casco "sí que es una medida interesante, a tener en cuenta", pero se ha opuesto a su obligación porque podría "cortar las alas a más de uno" a la hora de usar la bicicleta.
Por su parte, Francisco Bastida Freijedo, de la Asociación de Cicloturistas, ha señalado que es evidente que la utilidad del casco es mucha, y como tal hay que fomentarlo, pero ha señalado que "ése no es el debate". Así, ha apuntado que si se rebajara a 10 kKm/h el límite de velocidad también se evitarían accidentes, pero no se hace porque sería una medida "desproporcionada".
Atropello legislativo a la movilidad sostenible
En este sentido, ha defendido que obligar a llevar casco desincentivaría el uso de la bicicleta, lo que provocaría "un daño social que es mayor que el beneficio que entrañaría". "La obligación del casco es un atropello legislativo a la movilidad sostenible", ha señalado. Además, ha indicado que, en los accidentes de bicicletas, "el ciclista no se cae, al ciclista lo tiran", por lo que ha abogado atajar las causas de estos accidentes fomentando la educación o calmando el tráfico.
Mientras, David Rojas-Rueda, asesor de la OMS en el Área de Transporte y Salud, ha señalado que la bicicleta produce beneficios para la salud pública, pero se ha mostrado en contra de la obligatoriedad, ya que "el riesgo es menor al beneficio" de fomentar el uso de la bicicleta. "La evidencia no justifica esta intervención en ningún grupo de edad", ha señalado.
Así, ha indicado que según un estudio llevado a cabo en Canadá, donde el casco es obligatorio en algunas regiones, no hay diferencia en el número de hospitalizaciones por accidentes entre aquellas regiones donde se ha obligado a llevar casco por ley a los ciclistas y aquellas que no obligan a su uso. Sin embargo, otro estudio llevado a cabo en Australia, donde también está implantada la medida, encontró que el 44 por ciento de los niños que no usaban casco antes de la ley dejaron de usar la bicicleta tras la norma.
Por ello, considera que si se decide obligar a usar casco sólo a los niños podría implicar una reducción sustancial en el uso de la bicicleta. Por el contrario, ha abogado por fomentar el uso de este vehículo, ya que hay estudios que demuestran que cuando se incrementa el número de usuarios, se reduce la accidentalidad en el colectivo.
Ventajas y desventajas
La diputada del PP, Susana Sumelzo, ha señalado que también muchos protestaban por obligar a llevar casco en las motocicletas y ahora nadie lo cuestiona, por lo que ha pedido que no se eche abajo esta modificación sin analizar sus "ventajas y desventajas". Además, ha afirmado que la modificación del Reglamento General de Circulación contempla otras muchas medidas como la reducción de la velocidad en algunas vías o el aumento de la viabilidad de los ciclistas que mejoran la seguridad de este colectivo.
Por su parte, el portavoz del PSOE en la comisión, Carlos Corcuera, ha apuntado que las intervenciones de los expertos demuestran que la seguridad del ciclista no depende para nada de si lleva o no lleva el casco, por lo que se ha mostrado a favor del uso del casco, pero de forma voluntaria y no por obligación.
El diputado de la Izquierda Plural Ricardo Sixto ha señalado que "proteger la cabeza con un casco no va a proteger otras partes del cuerpo" y ha abogado por "actuar sobre quien ocasiona la mayor gravedad en un accidente en el que se ve envuelto un ciclista", que en la mayoría de los casos es un vehículo motorizado. "Es fundamental introducir medidas que pacifiquen el tránsito", ha indicado.
Por último, el diputado de CiU Jordi Jané se ha mostrado favorable a buscar una fórmula que introdujera una edad antes de la cual el casco fuera obligatorio en ciudad, mientras que para el resto se recomendaría su uso.
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